¿Te dicen que no sales ni en rifa? Si lo tuyo son las decepciones amorosas y estás harto de intentarlo, quizá encuentres una respuesta en la sologamia.
Tradicionalmente, muchas personas han creído en los mitos del amor a más no poder, lo que los lleva a creer que necesitan encontrar su otra mitar o "media naranja", sin embargo, con el paso del tiempo y las diferentes formas de pensar y actuar esto se comienza a revertir para dar entrada a la sologamia o la tendencia a casarse con uno mismo, un tema que está en boga, sobre todo para quienes consideran que su felicidad no depende de otros.
Se trata de un nuevo grupo de individuos quienes se conciben como seres completos. Esta creencia la llevan hasta el límite de casarse consigo mismo; y hasta ahora, son las mujeres quienes comienzan a practicarla con más frecuencia.
La sologamia es entonces una manera de manifestar la satisfacción personal y sentirse autosuficiente para afrontar su vida sin necesidad de tener una pareja.
Uno de los primeros casos que se conocen ocurrió en 1993, cuando la americana Linda Barker se casó consigo misma en una ceremonia ante 75 invitados. Se trata de hacer cosas por una misma y no esperar a que otra persona las haga por ti.
Los que conciben la sologamia como el mejor modo de darse amor es porque han asumido un compromiso de quererse sin esperar este sentimiento de otros.
Es decir, el bienestar, la confianza en sí mismos, y la plenitud del amor no se buscan en otra persona, ni se ruega, sino que se obtiene desde la interioridad.
Aunque es una tendencia bastante nueva, ya comienza a recorrer bastantes partes del mundo, por lo que podría afirmarse que cada vez es más exitosa.
Quienes asumen el matrimonio consigo mismo lo hacen porque:
Es igual que la convencional pero sin pareja.
Se busca el lugar de la recepción, se tiene una lista de invitados, se toma en cuenta la música y la ceremonia, que también puede hacerse con otras personas que ya practican la sologamia.
¡Hay incluso una luna de miel! La cual se puede notar en las postales que la persona recién casada manda desde su destino.
Los anillos tampoco son un problema, porque quienes se cansan consigo mismo se dan uno de autocompromiso.
Está claro que este matrimonio no tiene una validez legal, es más una especie de símbolo para dar a conocer este concepto y destacarlo.
No obstante, es posible que con el transcurrir del tiempo este vacío legal termine de llenarse, dado que cada vez más mujeres deciden asumir este compromiso.
Sí, porque hay empresas dedicadas a organizar la celebración de este tipo de bodas.
En Japón, esta práctica es una moda total. Ejemplo de ello es Cerca Travel, una empresa de viajes japonesa de Kyoto, que desde el 2014, ofrece un paquete de dos días con todo lo necesario, desde el vestido, el servicio de maquillaje, sesión de fotos, estancia en hotel, etc. por un precio fijo.
A pesar de que la sologamia cada vez tiene más auge, muchos no entienden cuál es el objetivo o la finalidad de esta práctica.
Y que, al final de todo, cuando una persona es lo suficientemente plena, sabe y conoce de antemano el amor infinito hacia sí mismo no tendría la necesidad de gritarle al mundo y hacérselos saber a través de una celebración.
Esta, al fin y al cabo, se ajusta a los roles establecidos por la sociedad; es decir hay una vestimenta partícular, ceremonia, invitados, anillo, votos, etc.
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