El cuidado ambiental y la sustentabilidad puede aplicarse en todos los ámbitos de la vida cotidiana y siendo más específicos, en todos los rincones de nuestro hogar.
La cocina es uno de ellos, espacio en el que pasamos gran parte de nuestro tiempo y en el que perfectamente podemos aplicar las tres erres: reducir, reutilizar y reciclar. Dale un toque eco-friendly a tu cocina con estas recomendaciones.
El concepto “eco friendly”, tal como su nombre lo indica, buscar ser amigable con la naturaleza, reuniendo esfuerzos y acciones para crear un cambio de mentalidad global que beneficie al planeta, haciendo hincapié en el ahorro de recursos, como agua y energía.
El interiorismo, de igual forma, se ha unido a esta misma causa y en los últimos años se ha enfocado en crear espacios agradables que a su vez sean respetuosos con el medio ambiente. A través de mobiliario alternativo fabricado con materiales sostenibles, (en conjunto con medidas adicionales) el diseño de interiores ahora permite contribuir a la mejora del medio ambiente en nuestro día a día.
Ahora bien, nuestra cocina como tal, se caracteriza por ser un espacio compartido, de uso diario y en donde comúnmente se tiene gran parte de los aparatos electrónicos. Por estos motivos, afecta directamente en la salud, la economía y el medio ambiente. A continuación te damos 7 consejos para convertirla en “eco friendly”.
1. Mobiliario y decoración
Como estrategia más sostenible, se puede emplear madera natural, reciclada y/o de tala controlada en los muebles de cocina, por ejemplo, en los gabinetes, la mesa y las sillas o taburetes. Para las encimeras, existen aquellas fabricadas de vidrio reciclado y hormigón o bien, las que son elaboradas con materiales naturales, papel reciclado o de cáñamo.
En cuanto a la pintura interior, la ecológica es una buena opción, no sólo porque tiene muy bajos índices de compuestos orgánicos volátiles (COV), sino porque se seca más rápido y es libre de olores.
2. Iluminación
Lo más recomendable para reducir la factura eléctrica son focos ahorradores, o la iluminación LED, que a su vez disminuye la emisión de CO2 a la atmósfera. Asimismo, para aprovechar la luz natural, utiliza colores claros en las paredes y en las cortinas. También puedes instalar sistemas reguladores de intensidad, con distintos niveles de iluminación o detectores de presencia.
3. Electrodomésticos
Tanto el refrigerador como el horno de microondas son dos de los aparatos indispensables en la cocina y que más energía consumen. Con respecto al refrigerador, se recomienda abrir las puertas lo menos posible, deshielar el congelador con frecuencia y mantener una temperatura promedio de 6° centígrados. Y en cuanto al microondas, lo mejor es desenchufarlo cuando no se esté usando. Esto también aplica para la licuadora, cafetera, tostador, etc.
4. Agua
Cambia los garrafones y el agua embotellada por un purificador. A la larga verás que es una opción mucho más económica y por supuesto, menos contaminante. Para el grifo, opta por uno con aireador, pues a través de su sistema, compensa la presión y ahorras hasta 50% de agua. Y pos supuesto, no olvides cerrar el grifo cuando no lo estés usando.
5. Desechos
Separa la basura y clasifícala en orgánica e inorgánica. Los vegetales y restos de comida pueden usarse como composta casera, mientras que envases y frascos pueden reutilizarse para distintos fines en el hogar. El pet y el cartón pueden venderse o donarse.
6. Limpieza
Muchos de los productos de limpieza son los principales enemigos del concepto eco friendly; principalmente los lava trastes, que contienen componentes químicos contaminantes. En su lugar, elige aquellos que son biodegradables, libres de cloro, fosfatos y parabenos. También puedes limpiar tu cocina con bicarbonato de sodio, limón y vinagre.
7. Alimentos
Finalmente, elige productos de temporada, como frutas y verduras. No sólo ayudas a la naturaleza, ya que se cultivan respetando el calendario estacional, sino que se utilizan menos recursos para su transportación. También puedes reducir tu consumo de carne a la semana, pues la ganadería representa un 18% del total de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero.
Fuentes: