Google Hong Kong celebra el Día Nacional de China y conmemora la fundación de la República Popular de China el 1 de octubre de 1949. El doodle muestra a un hombre y una mujer con bolsas de compras, debido a que los comercios ofrecen todo tipo de descuentos y liquidaciones con movito de la fiesta nacional. También hay una niña con una linterna roja (símbolo de fiesta, suerte y felicidad), y otro con una bandera. HISTORIA La entrada en China de las potencias europeas en el siglo XIX había comportado un cierto desarrollo industrial en una estrecha franja costera y una apertura comercial hacia Occidente. También había surgido una burguesía comercial, aunque numéricamente era poco importante. De este modo, China mantenía una rígida estructura social, que inculcaba al pueblo la sumisión a las jerarquías políticas, sociales y familiares. La agricultura seguía utilizando los métodos tradicionales y se basaba en el cultivo extensivo del arroz, el maíz y la patata. En los últimos decenios, la población había aumentado enormemente, pero seguía sujeta a las tradicionales dificultades naturales (inundaciones, sequías...) que daban lugar a hambrunas periódicas y a la muerte de millones de campesinos. Una minoría de grandes propietarios detentaba la propiedad de la tierra que era trabajada por los campesinos bajo un régimen de tipo feudal. Vivían sumidos en la pobreza y asfixiados por las rentas que debían pagar a los señores (más de mitad de la cosecha). Políticamente, después de la destitución del último emperador en 1911, se había proclamado la República, que estaba en manos de las fuerzas nacionalistas del Kuomintang, partido fundado en 1905, que dirigió el movimiento insurreccional que puso fin al tradicional Imperio Chino, instaurando una democracia parlamentaria y proponiéndose liberar al país del imperialismo extranjero. Estuvo dirigido primero por Sun Yat-sen y después por Chiang Kai-chek, quien orientó al país hacia una vía muy conservadora, que dio lugar a una fuerte oposición comunista. El Partido Comunista creado en 1921 y dirigido por Mao Zedong, tenía su fuerza entre los campesinos y defendía la necesidad de un reparto de la propiedad entre los campesinos pobres. En 1927 se enfrentó a la política del Kuomintang y proclamó la necesidad de la revolución armada de los campesinos. En 1934, las tropas comunistas emprendieron lo que se llamó la "Larga Marcha": recorrieron cerca de 12.000 km huyendo del cerco que les habían tendido los ejércitos nacionalistas. Después de un enfrentamiento con las tropas de Chiang Kaí-chek, los comunistas, dirigidos por Mao, se refugiaron en Yenan, donde a partir de 1935 promovieron la creación de una República Popular. La Segunda Guerra Mundial puso un paréntesis en la guerra civil: comunistas y nacionalistas pelearon juntos contra los japoneses. Durante esta guerra, entre 1937 y 1946, China fue invadida por las tropas niponas. Los comunistas chinos desempeñaron un papel muy importante en la lucha contra los japoneses y consiguieron ganarse el apoyo de los campesinos gracias a las medidas revolucionarias que se ponían en práctica en los territorios bajo control comunista: reparto de las tierras, aplazamiento de deudas, limitación de impuestos, etc. La capitulación japonesa de 1945 llevó a China hacia una guerra civil que enfrentó a los comunistas y a los nacionalistas del Kuomintang, que se habían reconciliado temporalmente para constituir un Frente Nacionalista anti japonés en 1937. Las fuerzas comunistas controlaban una buena parte del territorio chino que reunía a más de 100 millones de habitantes, la mayoría campesinos. El resto del territorio, es decir, las zonas costeras y la mayoría de las grandes ciudades, estaba en manos del Kuomintang, que se oponía a la reforma agraria fomentada por los comunistas y que contaba con el apoyo de Estados Unidos. En 1947 las fuerzas comunistas protagonizaron una gran ofensiva que culminó con la reconquista de Manchuria y la conquista de las ciudades más importantes. Sumido en el desorden y la corrupción, el ejército nacionalista cesó la lucha y los dirigentes del Kuomintang abandonaron el continente y se refugiaron en la isla de Formosa (Taiwan) bajo la protección de la flota americana. Tras el triunfo del ejército comunista, el 1 de octubre de 1949, Mao proclamó en Pekín el nacimiento oficial de la República Popular China.
La República Popular China se fundó el 1 de octubre de 1949 con una ceremonia en la Plaza de Tian'anmen. En la ceremonia, el Gobierno de Mao Ze Dong, Presidente de la Central del Pueblo, declaró solemnemente la fundación de la República Popular China y levantó la primera bandera nacional de China en persona. El Gobierno Central del Pueblo aprobó la Resolución sobre el Día Nacional de la República Popular China el 2 de diciembre de 1949, en la que declaraba que el 1 de octubre era el día nacional. Desde 1999, el Gobierno chino amplió las vacaciones del Día Nacional a una semana, la cual se llamó la Semana Dorada. Su objetivo es ayudar a expandir el mercado de turismo interno y dar a la gente el suficiente tiempo para hacer visitas familiares de larga distancia. Para muchos la Semana Dorada, se está convirtiendo más en una cuestión económica de la temporada de otoño, que política. Los comercios durante estos días ofrecen todo tipo de liquidaciones y ofertas en sus productos con motivo del Día Nacional, los escaparates están llenos de carteles de descuentos y es una buena oportunidad para comprar lo que antes habían seleccionado; en esta semana el movimiento económico en China, aumenta considerablemente.
Por todas las calles de las ciudades y pueblos se cuelgan linternas rojas (símbolo de fiesta, suerte y felicidad), en oficinas gubernamentales, comercios y edificios particulares; banderas, imágenes de Mao Tse-Tung y se instalan macetas con la flor oficial de China: la peonia; se calcula que en Pekín se instalan cerca de unas 200.000. Toda la ciudad queda decorada en rojo y preparada para dar la bienvenida a los visitantes. El Día Nacional se celebra por toda China continental, Hong Kong, y Macao con varias festividades organizadas por el gobierno, incluidos fuegos artificiales, conciertos y desfiles. Los lugares públicos, como la Plaza de Tian'anmen de Pekín, se decoran con un tema festivo. Se exhiben públicamente retratos de los líderes venerados, como Mao Zedong. |