Antes de que conociéramos el término y nos familiarizábamos con él, la gente decía "Esa persona tiene carácter, dice sí cuando es sí y no cuando es no".
Hoy en día ya sabemos que eso significa ser asertivos, una palabra que a simple vista parece fácil, pero que tiene un gran peso. Conocer a fondo su significado y ponerlo en práctica en nuestra vida y aplicarla en nuestras relaciones no siempre es tan fácil.
Y es que no sólo se trata de ser asertivos en nuestro trabajo, con nuestra familia y amigos, también hay que serlo en nuestras relaciones sentimentales.
La asertividad debe estar presente desde el inicio de una relación para que esta sea plena y ambos miembros sean conscientes de que pueden ser sinceros.
Una de las situaciones más conocidas es la de aquella pareja que, en un principio, se compenetra muy bien, pero con el paso del tiempo, aparecen los conflictos y discusiones constantes llegando a preguntarse: ¿Qué nos está pasando?
La respuesta podría ser que hemos dejado de ser asertivos y esto ha originado los problemas.
Cabe señalar que la asertividad es una habilidad que no todas las personas tienen. "Se trata de la capacidad de comunicar lo que deseas de una forma positiva y proactiva, también significa ser claros, honestos y directos”, según la psicoterapeuta Joyce Martin.
Desde que iniciamos una relación de pareja, es necesario y muy importante, comunicar lo que queremos y sentimos con el fin de que la otra parte sepa lo que pensamos.
Un simple ejemplo: supongamos que nos molesta que nuestra pareja deje su ropa sucia tirada en el suelo y no en la cesta de la ropa sucia, sin embargo, nunca se lo hemos dicho, porque al principio podíamos soportarlo y pensábamos "bueno después lo hará".
Nos encontrábamos en la fase de la idealización, en la cual no veíamos los defectos de la persona amada y le permitíamos "todo". Pero ahora que esta etapa ha pasado nos damos cuenta de que no somos capaces de soportar que esta situación se extienda por más tiempo.
Al no habérselo comunicado a nuestra pareja, esta nunca se ha dado cuenta que eso podría molestarnos. De hecho, tal vez le cueste ahora corregir el problema, pues se ha "acostumbrado" a esta actitud. Incluso puede que no entienda que, de repente, te moleste tanto.
Lo que ella no sabe es que no has sido capaz de ser asertiv@ durante todo este tiempo y que, por eso, no le has comunicado previamente lo que no soportabas ¿y el resultado? Discusiones constantes, falta de entendimiento y una gran incomodidad por parte de ambos.
Generalmente no estamos acostumbrados a que nos hablen directamente.
Nos incomoda un "no" y de plano sentimos que la otra persona está siendo agresiva con nosotros, pues nos han educado para complacer al otro, sin expresar lo que en verdad queremos.
El psicólogo clínico Randy Paterson, autor del Libro de la Asertividad, explica que uno deja de ser asertivo para tratar de encajar mejor con los otros. No obstante, Paterson recomienda seguir siendo amable al mismo tiempo que se es asertivo.
La asertividad no tiene nada que ver con la agresividad, se trata simplemente de defender con firmeza lo que piensas y crees. No le haces daño a la otra persona y no hay ningún tipo de hostilidad. Si así lo entiende tu pareja, es necesario hablar y comunicarse de forma abierta con el fin de llegar a un entendimiento mutuo.
Muchos de los problemas de pareja surgen por la falta de comunicación y esto implica, también, ausencia de asertividad. ¿De qué nos sirve callarnos lo que nos molesta? ¿Por qué no somos sinceros con aquello que no nos agrada? Tarde o temprano terminaremos explotando y a nuestra relación le lloverán todas las consecuencias.
Está claro que, para mantener relaciones plenas y saludables, la asertividad es un elemento importante. Pero, ¿por qué hay personas más asertivas que otras? Esto depende de lo cuidada que esté la autoestima. A mayor autoestima, mayor asertividad.
Paterson asegura que las mujeres pueden ser menos asertivas en la relación de pareja, porque a veces son criadas en un ambiente de sumisión. El psicoanalista también considera que los hombres pueden ser agresivos al imponer sus ideas, lo cual no implica que sean asertivos, sino impositivos y machistas.
La inseguridad es una nefasta aliada para las relaciones de pareja, pues seremos susceptibles a la manipulación y el autoritarismo. No debes creer que en las relaciones todo debe ser "sí" y las discusiones no tienen que estar presentes. Cuando se discute es porque hay puntos de vista diferentes, ¡lo que es positivo!
En pareja debe fomentarse la comunicación y nunca guardarse algo hasta que al final explotemos y termine saliendo en forma de rencor. Es mejor expresar lo que sentimos, aunque nos dé miedo de cómo reaccionarán nuestra pareja; ¿Qué más da? Al fin y al cabo, lo que pensamos terminará saliendo de alguna u otra manera.
Recuerda: solamente siendo asertivos conseguiremos tener relaciones más felices.
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