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Propio de los países europeos
Para los tiempos fríos se antoja calentar la garganta con una bebida caliente, aquí en méxico acostumbramos el ponche y los atoles pero en otros países, sobre todo europeos suelen tomar el vino a una temperatura a punto de ebullición. El glühwein o vino caliente se consume tradicionalmente durante la época de invierno en países como Alemania, Polonia, Hungría y Francia. En Polonia se le conoce como "grazniec" y el ingrediente que le caracteriza es la miel, Francia lo llama "vin chaud" (vino caliente) al que se le agrega canela, especia que le suma un suave toque de picor; por su parte, Hungría le conoce como "forralt bor" (vino quemado) al que se le agrega clavo de olor, en Alemania "glühwein" (vino encendido), se dice "glögg" en Escandinavia, mientras que los italianos del Norte lo llama "vin brulé".
Origen
Dicha bebida surgió en la antigua Roma en el siglo I de nuestra era como una medicina entre los legionarios romanos. Era conocida como "Conditum Paradoxum" y acompañaba a donde quiera que fueran los ejércitos del impero; ellos tenían la costumbre de beberlo en invierno porque fortifica, relaja y convoca al sueño. La receta original llevaba vino caliente, miel, pimienta, laurel, azafrán, dátiles asados y pasas. Con el paso del tiempo y, dependiendo de la región en la que se preparaba, se fueron añadiendo elementos a la receta como canela, clavo de olor, cardamomo, anís o cáscara de naranja. Actualmente es una preparación muy popular que consiste en vino, algún endulzante como miel, almíbar o azúcar y distintas especias.
¿Qué tipo de vino se utiliza?
Se puede utilizar vino tinto o blanco, si se opta por el segundo, la recomendación es agregar azúcar sin refinar para conseguir un mejor sabor. Preparar vino caliente con vino tinto es la mejor opción por sus propios componentes: el tinto es más rico en taninos y polifenoles, los cuales aumentan la temperatura corporal. Así también, se debe tomar en cuenta que éste sea de calidad media, ya que uno de baja calidad si se calienta de más perjudica gravemente el estado de este líquido y puede amargar el sabor. Los vinos que mejor funcionan para preparar esta bebida son los jóvenes, ligeros y afrutados, dejándo de lado los tintos que ponderen el roble, la crianza y hasta el añejamiento.
Hervor
Los húngaros han perfeccionado tanto la receta que conocen el momento exacto en el que deben retirar la preparación del fuego, qué cantidad de azúcar tienen que utilizar, etc. Así que para que tengas un muy buen resultado es conveniente no calentarlo en ollas de aluminio para no provocar un extraño sabor metálico en el vino, lo mejor es emplear una olla de acero inoxidable, cerámica o vidrio resistente al calor. Para prepararlo hay que evitar que el vino llegue al punto de ebullición, ya que el alcohol se puede evaporar por completo, lo ideal es prepararlo a fuego lento y agregar poco a poco todos los ingredientes. Se puede acompañar con galletas, un trozo de chocolate oscuro o tartas de frutos rojos.
Receta para preparar vino caliente
Ingredientes
Preparación - En una cacerola poner a fuego bajo-medio el vino, luego se le va integrando el azúcar, revolviendo constantemente con la ayuda de una cuchara o batidor de globo. - Enseguida se le agregan los demás ingredientes sin dejar de revolver. - Justo antes de que rompa el hervor, es el momento indicado para retirarlo del fuego. Si no nos terminamos todo el vino caliente que preparamos, lo dejamos enfriar y lo refrigeramos en un recipiente bien sellado por dos días más sin ningún problema. Fuentes:
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