Dos rabinos se aprestan a lavar el cadáver de un recién fallecido, antes de enterrarlo, según una tradición judía. El difunto poseía un desmesurado miembro sexual. * Aaron, ¿Tú ves lo que yo estoy viendo?... * Si Jacob, lo veo... es como la mía. * ¿Así de larga? * No, así de muerta. Colaboración de Gabriel Nuñez de León, Gto., México. |