Una estudiante entró a la oficina de su profesor. Observó si no había nadie en el pasillo. Y cerró la puerta. Profesor, yo haría "cualquier cosa" por aprobar esta materia, usted sabe, verdad el profesor levanto la mirada desde su escritorio y quedó mirandola. Ella era muy bella. La jovencita se le acercó seductora y repitió: Y cuando digo que haría "cualquier" cosa quiero decir "cualquier" cosa ¿Cualquier, cualquier cosa? Cualquier cosa profesor el profesor acerco su rostro a ella y le susurro muy suavemente en el oido, - ¿Podrías estudiar? Colaboración Gabriel Nuñez. |