Estaba una señora con su amante en la cama. El amante, no tenía una mano, estaba "mocho". Estando en pleno romance, la señora escucha que llega su esposo a casa. Se asusta y le dice al "mocho", "escondete que mi marido es campeón de tiro al blanco, campeón de tiro al arco y te puede matar, escóndete en el ropero". Se esconde el mocho y la señora se queda leyendo en la cama la biblia. Entra su esposo, y empieza a oler la habitación y exclama "Huele a hombre, huele a hombre, ¿a quien tienes aquí?" - A nadie mi amor, a nadie. Replica la esposa. - Estoy leyendo la biblia. - ¿Y que estás leyendo? - El sal-mo8 Y el mocho sale del ropero. |