Estaban dos niños a la puerta de uno de sus amigos gritando a voz en cuello:
— ¡'Ansiiinaaa!" 'Ansiiinaaa!?' — Sale la madre del chamaco al que se busca y muy enojada les dice: — ¡'Mi hijo no se llama Ansina, ¡¿eh?!, se llama Jelipe y ANSINA quiero que le digan. Colaboración de Joanna Pedroza, mexicana de Texas, USA. |