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| Un tipo se encuentra en el yate de su compadre agobiado por las enormes deudas que tiene y que no puede pagar. Decide tomar el camino fácil poniéndole fin a su desdichada vida lanzándose por la borda del yate con una gran piedra atada al cuello: - ¡Adiós compita, lo voy a extrañar! -le grita entre sollozos, mientras se lanza al mar. El compadre, asombrado por la decisión de su amigo, corre a verlo cómo se hunde, cuando repentinamente observa una mano que salía del agua y que le pedía desesperadamente ayuda. - ¡Sáqueme rápido, compa!, ¡Sáqueme rápido! - ¡Qué bueno que se arrepintió, compita!- le dice mientras termina de subirlo al yate. - ¡Qué bueno ni que ocho cuartos!, ¡Lo que pasa es que allá abajo hay un buzo al que le debo 10 mil dólares! Colaboracion de Gabriel Nuñez de Leon, Gto., Mexico. |
