Va un hombre por la playa con su mujer, y ella le pide que le compre un bikini, a lo que él le dice: Con ese cuerpo de lavadora ni lo pienses. Sigue caminando y le insiste la mujer... Bueno cómprame ese vestido, y repite el esposo Con ese cuerpo de lavadora ni lo pienses. Pasa el día, y por la noche ya en la cama el marido le dice a la esposa: Entonces vieja ¿hechamos a andar la lavadora? y la mujer le dice para ese pinche trapito mejor lávalo a mano. Colaboración de Gabriel Nuñez de León, Gto., México. |