Había un muchacho bien miedoso que tenía que pasar con su bicicleta por un cementerio para ver a su novia, y le dice:
- Ay Lucia, ¿qué crees que me paso?, siempre que vengo a tu casa y paso por el cementerio un muerto se sube atrás de mí ¡qué hago! - Ay Martín pues pregúntale si tiene dinero, y si tiene que te diga donde está. Ya al segundo día vuelve a pasar por el cementerio y le pasó lo mismo... El muerto se sube atrás de él, y el muchacho todo asustado le dice: - ¿Oye tienes dinero? Y el muerto le dice: - Sí Entonces el muchacho le dice: - Pues cómprate tu propia bicicleta.
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