01 | Sí, quiero que sepan qué dura es la lucha que sostengo por ustedes, por los de Laodicea y por tantos otros que no me conocen personalmente. |
02 | Mi deseo es que se sientan animados y que, unidos estrechamente en el amor, adquieran la plenitud de la inteligencia en toda su riqueza. Así conocerán el misterio de Dios, que es Cristo, |
03 | en quien están ocultos todos los tesoros de la sabiduría y del conocimiento. |
04 | Los pongo sobre aviso para que nadie los engañe con sofismas. |
05 | Aunque ausente con el cuerpo, estoy presente en espíritu, y me alegro al ver el orden que reina entre ustedes y la firmeza de la fe que tienen en Cristo. |
06 | Vivan en Cristo Jesús, el Señor, tal como ustedes lo han recibido, |
07 | arraigados y edificados en él, apoyándose en la fe que les fue enseñada y dando gracias constantemente. |
08 | No se dejen esclavizar por nadie con la vacuidad de una engañosa filosofía, inspirada en tradiciones puramente humanas y en los elementos del mundo, y no en Cristo. |
09 | Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la divinidad, |
10 | y ustedes participan de esa plenitud de Cristo, que es la Cabeza de todo Principado y de toda Potestad. |
11 | En él fueron circuncidados, no por mano de hombre, sino por una circuncisión que los despoja del cuerpo carnal, la circuncisión de Cristo. |
12 | En el bautismo, ustedes fueron sepultados con él, y con él resucitaron, por la fe en el poder de Dios que lo resucitó de entre los muertos. |
13 | Ustedes estaban muertos a causa de sus pecados y de la incircuncisión de su carne, pero Cristo los hizo revivir con él, perdonando todas nuestras faltas. |
14 | Él canceló el acta de condenación que nos era contraria, con todas sus cláusulas, y la hizo desaparecer clavándola en la cruz. |
15 | En cuanto a los Principados y a las Potestades, los despojó y los expuso públicamente a la burla, incorporándolos a su cortejo triunfal. |
16 | Por eso, que nadie los critique por cuestiones de alimento y de bebida, o de días festivos, de novilunios y de sábados. |
17 | Todas esas cosas no son más que la sombra de una realidad futura, que es el Cuerpo de Cristo. |
18 | Que nadie los prive del premio, bajo pretexto de «humildad» y de un «culto de los ángeles». Esa gente tiene en cuenta solamente las cosas que ha visto y se vanagloria en el orgullo de su mentalidad carnal, |
19 | pero no se mantiene unida a la Cabeza que vivifica a todo el Cuerpo y le da cohesión por medio de las articulaciones y de los ligamentos, a fin de que su crecimiento se realice en Dios. |
20 | Ya que ustedes han muerto con Cristo a los elementos del mundo, ¿por qué se someten a las prohibiciones de |
21 | «no tomar», «no comer» y «no tocar», como si todavía vivieran en el mundo? |
22 | Todo esto se refiere a cosas destinadas a ser destruidas por su mismo uso y no son más que preceptos y doctrinas de hombres. |
23 | Estas doctrinas tienen una cierta apariencia de sabiduría por su «religiosidad», su «humildad» y su «desprecio del cuerpo», pero carecen de valor y sólo satisfacen los deseos de la carne. |