01 | En diversas ocasiones y bajo diferentes formas Dios habló a nuestros padres por medio de los profetas, |
02 | hasta que en estos días, que son los últimos, nos habló a nosotros por medio del Hijo, a quien hizo destinatario de todo, ya que por él dispuso las edades del mundo. |
03 | El es el resplandor de la Gloria de Dios y en él expresó Dios lo que es en sí mismo. El, cuya palabra poderosa mantiene el universo, también es el que purificó al mundo de sus pecados, y luego se sentó en los cielos, a la derecha del Dios de majestad. |
04 | Ahora, pues, él está tanto más por encima de los ángeles, cuanto más excelente es el Nombre que recibió. |
05 | En efecto, ¿a qué ángel le dijo Dios jamás: Tú eres mi Hijo, yo te he dado la vida hoy? ¿Y de qué ángel dijo Dios: Yo seré para él un Padre y él será para mí un Hijo? |
06 | Al introducir al Primogénito en el mundo, dice: Que lo adoren todos los ángeles de Dios. |
07 | Tratándose de los ángeles, encontramos palabras como éstas: Dios envía a sus ángeles como espíritus, y a sus servidores como llamas ardientes. |
08 | Al Hijo, en cambio, se le dice: Tu trono, oh Dios, permanece por siglos y siglos, y tu gobierno es gobierno de justicia. |
09 | Amas la justicia y aborreces la maldad; por eso, oh Dios, tu Dios te concedió una consagración real que es fuente de alegría, con preferencia a tus compañeros. |
10 | Y también leemos: Tú, Señor, en el principio, pusiste la tierra sobre sus bases, y los cielos son obra de tus manos. |
11 | Ellos desaparecerán, pero tú permaneces. Serán para ti como un vestido viejo; |
12 | los doblarás como una capa, y los cambiarás. Pero tú eres siempre el mismo y tus años no terminarán jamás. |
13 | A ninguno de sus ángeles dijo Dios: Siéntate a mi derecha hasta que ponga a tus enemigos como tarima de tus pies. |
14 | Pues todos ellos no son más que funcionarios espirituales, y reciben una misión para bien de los que recibirán la salvación. |