Yo conozco a alguien que dijo: "Un día, hincado en Misa al momento de que el sacerdote eleva el Cuerpo de Cristo, alzo la mirada y me llega esa visión que me llenó de alegría y asombro ¡Es Jesús crucificado!" ¡Domine ut videam! ¡Domine ut sit! ¡Señor, que veamos! ¡Señor, que seamos! |