Hace unos meses caí en un blog cuya autora escribe desde Ciudad Juárez y habla acerca de temas de finanzas personales y sobre peso. El blog me llamó la atención por la seguridad y confianza con la que escribe Makahui (seudónimo de la autora) y me gustan varios artículos; sin embargo hay algunos posts que de plano considero están muy nublados. El blog en cuestión muestra el interior, la forma de pensar y sentir de mucha gente en nuestro país (y otros países) que se han dado cuenta que necesitan cambiar su forma de pensar para salir adelante y conseguir independencia financiera. Lo malo es que dentro de las buenas intenciones que tiene su autora al buscar compartir con la gente los conocimientos que va adquiriendo, también aparecen comentarios erróneos, equivocados y que pueden frenar su crecimiento económico y el de sus lectores. Un ejemplo: Hay un artículo titulado "La nueva división de clases: La deuda" donde critica los niveles socioeconómicos, basados en el ingreso, y sugiere que esa clasificación debería modificarse para tener en cuenta el grado de endeudamiento de las personas. Al final concluye así: Ahora existen sólo dos clases sociales : la de los endeudados y los que viven sin deuda. ¿ Y tú, de que clase social eres? Esa frase es absurda e insensible por dos razones:
BENDITO CREDITOBasta recordar que esta crisis por la que estamos atravesando se agravó a raíz de que los bancos (por sus propias estupideces) no pudieron prestar dinero. La falta de crédito paralizó la economía. Basta recordar que los hombres más ricos del mundo estan endeudados por miles de millones de dolares. Ellos no evitan el endeudamiento, lo buscan, porque la manera de hacerse millonario es un apalancamiento INTELIGENTE. Lo malo no es contraer deuda, sino malgastar el dinero. Pero estamos hablando de millonarios..... Aqui algo más terrenal, un ejemplo personal. En marzo de este año compré un automóvil. De seguir la sugerencia equivocada, debí haber pagado de contado para evitar una deuda. Sin embargo, aunque tenía el dinero, busque el crédito. Ese mismo mes escribí un artículo titulado "Estamos de suerte", donde hablaba de la enorme oportunidad que había en la bolsa de valores. En lugar de pagar de contado ese coche que necesitaba, tome el crédito, y ese dinero se invirtió en acciones bursátiles. El dinero disponible se multiplicó por 2 en unos meses. De haber evitado la deuda, hoy tendría mi coche (depreciado) y 0 deudas. Hoy tengo el mismo coche, el doble de mi dinero y una deuda que puedo pagar cuando me plazca. Respodiento la pregunta planteada por Makahui, yo estoy dentro de los endeudados. Bénditos créditos!!!! PD: La inversión en bolsa de valores implica riesgos y requiere preparación. Capacítate!!!! |