01 | Hay reprensiones que son inoportunas, y hay silencios que revelan al hombre prudente. |
02 | Más vale reprender que guardarse el enojo, |
03 | y el que confiesa su falta se libra de la desgracia. |
04 | Como un castrado que ansía desflorar a una joven, así es el que quiere hacer justicia por la fuerza. |
05 | Uno se calla, y es tenido por sabio, y otro se hace odioso por su locuacidad. |
06 | Uno se calla porque no tiene qué responder y otro, porque espera la oportunidad. |
07 | El sabio guarda silencio hasta el momento oportuno, pero el petulante y necio no se fija en el tiempo. |
08 | El que habla demasiado se vuelve abominable y el que pretende imponerse se hace odioso. |
09 | A veces se saca provecho de la adversidad, y oras veces, la suerte acaba en desgracia. |
10 | Hay regalos que no te dan provecho, y hay otros, que reditúan el doble. |
11 | Hay desgracias que provienen de los honores, y hay gente humilde que pudo levantar cabeza. |
12 | Hay quien compra mucho a bajo precio, y después lo paga siete veces más. |
13 | El sabio se hace amar por sus palabras, pero los cumplidos del necio caen en el vacío. |
14 | El regalo del insensato no te aprovechará, porque él espera que le devuelvan mucho más: |
15 | de poco y echa en cara mucho, abre la boca como un pregonero, presta hoy y mañana exige. ¡Qué detestable es un hombre así! |
16 | El necio dice: «No tengo ni un amigo; nadie agradece mis beneficios; |
17 | los que comen mi pan tienen la lengua olvidadiza». ¡Cuántos y cuántas veces se reirán de él! |
18 | Más vale resbalar en el piso que con la lengua; así es como de repente caen los malvados. |
19 | Un hombre grosero es como un cuento inoportuno, que siempre está en boca de los mal educados. |
20 | Nadie aprueba el proverbio dicho por un necio, porque nunca lo dice en el momento oportuno. |
21 | A algunos la indigencia los preserva del pecado y, cuando descansan, no sienten remordimientos. |
22 | Hay quien se pierde por timidez, y se pierde por temor a un insensato. |
23 | Hay quien por timidez hace promesas a un amigo y se gana un enemigo inútilmente. |
24 | La mentira es para el hombre una mancha infamante: siempre está en boca de los ignorantes. |
25 | Es preferible un ladrón a un mentiroso inveterado, aunque uno y otro heredarán la perdición. |
26 | El que se acostumbra a mentir cae en la deshonra y su ignominia lo acompaña constantemente. |
27 | El sabio se abre camino con sus palabras y el hombre prudente agrada a los poderosos. |
28 | El que cultiva la tierra levanta bien alto su parva, y el que agrada a los grandes se hace perdonar la injusticia. |
29 | Dones y regalos ciegan a los sabios y son como un bozal que acalla las críticas. |
30 | Sabiduría escondida y tesoro oculto: ¿de qué sirven una cosa y la otra? |
31 | Es preferible el hombre que disimula su necedad al que oculta su sabiduría. |