Alergias por leche y huevo en niños

Muy seguramente todos conocemos a alguien que sufre de alguna alergia, entre las más comunes tenemos las causadas por el polen, mohos, caspa de animales y el polvo, sin embargo, existen alimentos de nuestra dieta que pueden ocasionar verdaderos estragos en nuestra salud.Se estima que del 10 al 15% de la población mundial padece algún tipo de alergia y existe evidencia de que su incidencia está aumentando en todo el mundo. siendo lo niños la población más sensible a alergias de tipo alimentario.

Una alergia es una respuesta inmunitaria equivocada, causada por un sistema inmunitario altamente sensible (hipersensible), nuestro sistema inmunitario regularmente nos protege de sustancias nocivas como los virus y bacterias, en el caso de las alergias lo que sucede es que el sistema inmune reacciona ante sustancias (alergenos) que generalmente no causan ningún daño, los factores que causan alguna alergias pueden ser tanto genéticos como ambientales. La primera vez que la persona tiene contacto con el alergeno puede no desarrollar ningún síntoma, sin embargo, se sensibiliza y en una segunda ocasión que se ponga en contacto con este la respuesta será inmediata y de manera severa.

Una vez que el sistema inmune reconoce un alérgeno este desencadena la producción y liberación de productos químicos denominados histaminas. Cabe destacar que la parte del cuerpo que entre en contacto con el alergeno juega un papel en los síntomas que se desarrollan. Por ejemplo, con frecuencia, los alergenos que se inhalan (polen o polvo) producen congestión nasal, prurito en garganta y nariz, producción de moco, tos. Un alergeno de los alimentos puede producir: dolor abdominal, cólicos, diarrea, náuseas, vómito o reacciones graves potencialmente mortales, como un choque anafiláctico (puede generar dificultad para respirar, desmayo e, incluso, cuando no recibe atención, la muerte).

Aunque las estadísticas muestran que el riesgo de sufrir un choque anafiláctico es del 1% y que el número de decesos al año por choque anafiláctico es 0.4 por cada millón de personas, debemos subrayar que este problema de salud pudiera presentarse en cualquier momento, aún sin tener antecedentes de alergia.

Los alergenos alimentario pueden ser de origen animal o vegetal, ya que los alergenos alimenticios son generalmente proteínas cada alimento contiene una número importante de potenciales alergenos, estos alergenos representan una mínima porción del alimento pero poseen una gran potencia biológica, por lo que pequeñas cantidades son suficientes para desencadenar síntomas importantes. Algunos alergenos pueden ser modificados por la acción del calor, mediante cocción u otra forma de calentamiento por arriba de los 60ºC reduciendo su alergenicidad e incluso en ocasiones aumentándola.

Como se menciono los alergenos pueden ser de origen animal o vegetal siendo los siguientes los más importantes:

Las alergias alimentaras más comunes, son las causadas por el huevo y la leche y estas son más persistentes de lo que se cree, en estudios recientes realizados por el Johns Hopkins Children's Center (EE.UU.) demostraron que este problema a tenido un incremento notable en los últimos 20 años.

La leche suele ser el primer alimento no homólogo que los niños reciben en cantidades considerables, lo cual indica que es el primer antígeno alimentario con el que se entra en contacto, siendo la mayor causa de reacciones adversas en la infancia cuya ingestión puede causar reacciones en la piel como hinchazón de los labios, boca, lengua, cara o garganta. También puede causar eccema (inflamación prolongada), urticaria, sarpullido o erupción cutánea o piel enrojecida, picor en la piel o en los ojos. Problemas respiratorios como estornudar, congestión nasal o nariz mocosa, toser o respirar con dificultad, y asma pueden también resultar de una alergia a la leche. Las principales proteínas de la leche que causan reacciones alérgicas son la caseína y las encontradas en el suero.

El huevo es un alimento de alto valor nutritivo, y esta considerado como el alimento más alergenico entre niños de dos a tres años, cuya ingestión puede causar síntomas dérmicos como urticaria e hinchazón el párpados y cara, y respiratorios como asma o riconjuntivitis. Y pueden estar acompañados de síntomas digestivos inmediatos como vomito, dolor abdominal o cólicos, que suelen tener lugar en las dos primeras horas de ingerir el alimento. La principal proteína del huevo causante de alergias es la albúmina situada en la clara.

Hasta ahora se admitía que el 75% de los niños con alergia a la leche dejaban de padecerla a los 3 años. Por el contrario, este estudio muestra ahora que el ritmo y porcentaje de remisión de la enfermedad es mucho menor. Sólo una quinta parte deja de ser alérgico a los 4 años, y un 42% a los 8. A los 16, generalmente un 79% de los niños inicialmente alérgicos ha dejado de serlo. Algo similar pasa con la alergia a los huevos. Un 4% deja de serlo a los 4 años, un 37% a los 10 y un 68% a los 6.

Esto no hace ver lo importante que es introducir paulatinamente los alimentos. Leche de vaca, huevos, pescados y frutos secos son, en ese orden, los alimentos con mas capacidad para producir alergia. Por lo que es importante que el pediatra determine los tiempo para introducir alimentos alergénicos a dieta de los niños.

José Iván Villanueva Veloz.