01 | Muchos han pecado por amor a las ganancias y el que busca enriquecerse hace como quien no ve. |
02 | Entre la juntura de las piedras se clava la estaca, y entre la compra y la venta se desliza el pecado. |
03 | El que no se aferra resueltamente al temor del Señor verá muy pronto su casa en ruinas. |
04 | Cuando se zarandea la criba, quedan los residuos: así los desechos de un hombre aparecen en sus palabras. |
05 | El horno pone a prueba los vasos del alfarero, y la prueba del hombre está en sus conversación. |
06 | El árbol bien cultivado se manifiesta en sus frutos; así la palabra expresa la índole de cada uno. |
07 | No elogies a nadie antes de oírlo razonar, porque allí es donde se prueban los hombres. |
08 | Si buscas la justicia, la alcanzarás, y te revestirás de ella como de una túnica gloriosa. |
09 | Los pájaros buscan la compañía de sus semejantes y la verdad retorna a aquellos que la practican. |
10 | El león está al acecho de su presa y el pecado, de los que practican la injusticia. |
11 | La conversación del hombre bueno es siempre sabia, pero el insensato es variable como la luna. |
12 | Mide tu tiempo cuando estés entre los necios, pero quédate largo rato entre la gente de criterio. |
13 | La conversación de los necios es odiosa y sólo les causa gracia el vicio desenfrenado. |
14 | Los que juran constantemente hacen erizar los cabellos y cuando discuten, hay que taparse los oídos. |
15 | Las disputas de los orgullosos hacen correr la sangre y es lamentable escuchar sus invectivas. |
16 | El que revela los secretos hace que le pierdan la confianza y no encontrará jamás un amigo íntimo. |
17 | Sé afectuoso y confiado con tu amigo, pero si has revelado sus secretos, no corras tras él, |
18 | porque como el asesino destruye a su víctima, así has destruido la amistad de tu prójimo: |
19 | como un pájaro que has dejado escapar de tu mano, así has perdido a tu amigo, y ya no lo recobrarás. |
20 | No corras detrás de él, porque está muy lejos, huyó como una gacela de la red. |
21 | Porque una herida puede ser vendada, y para la injuria puede haber reconciliación, pero el que revela los secretos nada puede esperar. |
22 | Algo malo trama el que guiña un ojo, y nadie logrará disuadirlo. |
23 | Delante de tus ojos, su boca es toda dulzura y se extasía con tus palabras, pero por detrás cambia de lenguaje y tiende una trampa con tus mismas palabras. |
24 | Yo detesto muchas cosas, pero más que nada a él, y el Señor también lo detesta. En el pecado, el castigo |
25 | El que tira una piedra hacia arriba, la tira sobre su cabeza, y un golpe traicionero hiere también al que lo da. |
26 | El que cava una fosa caerá en ella y el que tiende una red quedará enredado. |
27 | El mal que se comete recae sobre uno mismo, sin que se sepa siquiera de dónde proviene. |
28 | Sarcasmos e insultos son propios de los soberbios, pero el castigo los acecha como un león. |
29 | Caerán en la red los que se alegran de la caída de los buenos y el dolor los consumirá antes de su muerte. |
30 | También el rencor y la ira son abominables, y ambas cosas son patrimonio de pecador. |