01 | Del maestro de coro. De David. Al Señor me acojo, ¿por qué me decís: «Escapa como un pájaro al monte, |
02 | porque los malvados tensan el arco, ajustan las saetas a la cuerda, para disparar en la sombra contra los buenos? |
03 | Cuando fallan los cimientos, ¿qué podrá hacer el justo?» |
04 | Pero el Señor está en su templo santo, el Señor tiene su trono en el cielo; sus ojos están observando, sus pupilas examinan a los hombres. |
05 | El Señor examina a inocentes y culpables, y al que ama la violencia él lo odia. |
06 | Hará llover sobre los malvados ascuas y azufre, les tocará en suerte un viento huracanado. |
07 | Porque el Señor es justo y ama la justicia: los buenos verán su rostro. |